Cuando examinamos de cerca la cosmética convencional, nos dimos cuenta de varias incoherencias en la forma de hacer las cosas.

Hoy en día, a menos que se tenga un máster en química, es muy difícil descifrar la lista de ingredientes y composiciones de nuestros cosméticos. Así, cada día utilizamos cosméticos con ingredientes incomprensibles, derivados de la petroquímica, a veces incluso perjudiciales para nosotros y contaminantes para el medio ambiente.

Estos productos pueden contener más de 30 ingredientes diferentes, la mayoría de los cuales se producen en diferentes países y viajan miles de kilómetros antes de ser ensamblados en un país como México o Estados Unidos. Luego se importan a Costa Rica. Le dejo adivinar el impacto de carbono de todo esto...

Y por último, orgánicos o no, estos productos están casi siempre envasados en plástico de un solo uso, que todavía se recicla muy poco en Costa Rica y en el mundo (sólo un 10%) y nunca es infinitamente reciclable.